Como sucede con todo en la vida, antes de lanzarlo al público, hay que hacer algunas comprobaciones necesarias con el fin de llegar al punto que se desea y de esa forma brindarle a tus usuarios la web que se merecen. Antes de avisarle a todo el mundo que la web ya está online, te recomendamos hacer algunas comprobaciones en una página web para ver que todo está correctamente bien asentado.

Repasar el diseño

Mira que todo esté bien con el diseño, es decir que los colores sean los adecuados, que la tipografía sea coherente en todo momento, que el título en la barra superior también sea el correcto, que aparezca el favicon, en otros. Da un repaso general, página por página.

Funcionalidades

Otro de los puntos que hay que ver es la funcionalidad de la web. Con esto nos referimos por ejemplo a ver que los espacios entre los elementos sean iguales, que no haya cambios de ver la web desde Internet explorer o Chrome y si los hay que sean mínimos. Revisa también absolutamente todos los enlaces que aparezcan con el fin de redirigir las páginas hacia el punto que deben de ir. Hay que procurar no tener ningún error 404 en el sitio. También comprueba que los formularios que tengas funcionen correctamente y que se cumpla con la ley RGPD.

En cuanto al blog, hay que ver cómo se publica cada uno de los puntos, que haya categorías y etiquetas y que también estén presentes las redes sociales.

Adaptación

Prueba cómo se ve tu web en distintos dispositivos y que éstos tengan incorporados distintos tipos de sistemas, es decir, hay que probarlo tanto en un móvil Iphone como en un móvil Android para ver que realmente no hay ninguna diferencia entre uno u otro. Lo mismo con el ordenador, con un Windows y un Mac.

SEO

Mira que todas las páginas tengan adecuadamente colocado el SEO. Para eso puedes hacer uso de distintos plugings como por ejemplo Yoast by SEO que te ayudará a colocar lo que haga falta en la descripción de cada entrada y cada página.

También recuerda de enviar el Robots.txt para que los buscadores encuentren tu web.

Una cosa fundamental en todo ello es la velocidad de carga de la web. Si la web no carga rápido, entonces te puedes encontrar con algunos problemas como por ejemplo el hecho de que no se posicione adecuadamente.

Todas estas comprobaciones en una página web las puedes hacer junto con el profesional que te esté ayudando con el diseño web.